A raíz de la propuesta del presidente de la Junta Central Electoral, Doctor Julio Cesar Castaño Guzmán, de que se suspenda la asignación a los senadores de los fondos del denominado "barrilito", se ha producido una andanada opiniones de sectores a favor de que esta mafiosa operación sea descontinuada. Entre los sectores que han criticado se destacan la iglesia católica, a través del Cardenal, López Rodríguez, asi como diversas organizaciones de la sociedad civil y el empresariado.
Sin embargo, lo beneficiarios del "barrilito" han salido como gatos boca arriba en defensa de sus privilegios. Prácticamente todos los senadores se han manifestado a favor, y los que no lo han expresado, mantienen un silencio cómplice.
Por mi parte, desde que este fondo se originó, lo he denunciado como una forma descarada y perversa de dilapidar los recursos del Estado, que al igual que las exoneraciones y las ONG, solo sirven para afianzar la corrupción, el clientelismo y parasitismo.
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