El gobierno dominicano ha rechazado a través de diferentes voceros, el informe sobre los derechos humanos dado a conocer por Estados Unidos, donde se denuncian violaciones y corrupción de las fuerzas de seguridad del Estado. Uno que salió en rechazo del informe fue el Ministro de la Presidencia, César Pina Toribio, argumentó que Estados Unidos debe revisarse internamente en lugar de supervisar a los demás países. Consideró el informe como "injusto y poco objetivo".
En su informe anual sobre la situación de los derechos humanos en el mundo, Estados Unidos se refiere a la corrupción de la policía dominicana y sus prácticas, que van desde asesinatos, casos de torturas, violencia y discriminación contra los inmigrantes haitianos y la negación de derechos a sus descendientes nacidos en el país. El informe cita como caso concreto que las fuerzas de seguridad estuvieron "implicadas en muchos asesinatos injustificados y fuera de la ley"; así como "en excesos en el uso de la fuerza” y "abuso físico de detenidos", por medio de palizas.
No hay dudas que la valoración de las autoridades dominicanas y el informe de Washington acerca del respeto a los Derechos Humanos andan por caminos diferentes, pero lo cierto es que la mayoría de los aspectos que se señalan en el referido informe, no se pueden ocultar. Nuestro país tiene que dar pasos para superar esas practicas vejatorias y atentatorias contra la dignidad humana, si queremos alcanzar una mejor valoración en futuras evaluacione.
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