Una:
El director de la oficina de Custodia de Bienes Encautados (OCABID), Laureano Guerrero, denuncio que esa entidad “tiene en su inventario 47 residencias, y 22 apartamentos registrados como entregadas a militares para cuidarlos o donadas a instituciones que combaten las drogas” y agrega “Están dadas en la administración pasada y donde viven amigas y personalidades, y políticos. Las están usufructuando” Diario Libre, 6 de enero 2010, Págs., 1 y 6. El señor Laureano Guerrero tiene 5 meses al frente del cargo.
Otra:
La placa OL00234, utilizada en el vehiculo desde el que ametrallaron al ex coronel Amado González González estaba asignada a un ex jefe de Estado Mayor del Ejercito Nacional. La misma placa le fue cargada mediante “formulario 25” al ex mayor del ejercito Bienvenido Antonio Saviñon Aybar, a quien se la robaron el 20 de noviembre del 2009. Pero este último oficial había sido separado de la institución, vinculado a asuntos de drogas. Y como si esto fuera poco, en los registros de la Contraloría aparece el mismo ex oficial como empleado de la Secretaría Administrativa de la Presidencia con datos del mes de octubre del 2009. Diario Libre asegura que aparece vestido de oficial del ejército.
Estos casos nos pueden dar una idea de como andan las cosas en el pais en materia de controles.
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