La visita de Terry Kennedy

Recientemente visitó el país la señora Kerry Kennedy, fundadora del Centro para los Derechos Humanos Robert F. Kennedy. Durante su estadía en suelo dominicano la activista de los Derechos Humanos realizó varios encuentros con autoridades dominicanas, con las cuales trató sobre la situación en que viven miles de dominicanos de ascendencia haitiana y haitianos inmigrantes en la República Dominicana. Esto escribi sobre Sonia Pierre. Pulse.

La señora Kennedy siempre estuvo acompañada de la señora Sonia Pierre, defensora de los derechos de los trabajadores haitianos y de origen haitiano en el país, a quien le fue otorgado en el 2006 el premio de Derechos Humanos del Memorial Robert F. Kennedy por su labor de protección de de los derechos de los inmigrantes haitianos y sus descendientes.

La principal preocupación expresada por la estadounidense tiene que ver con la imposibilidad que se les presenta a los dominicanos de ascendencia haitiana para obtener sus documentos de identidad, debido a la decisión de la Junta Central Electoral de la documentación, bajo el argumento de que los mismos son extranjeros.
En una rueda de prensa que concedió a los medios de comunicación dijo, que visitó varios bateyes de la las zonas cañeras y que pudo conocer la realidad que afecta a muchos de los trabajadores: "Conocimos a hombres y mujeres nacidos en la República Dominicana que han vivido aquí toda su vida y se sienten amenazados porque sus documentos están siendo retenidos y están preocupados porque si son detenidos les pueden deportar a Haití, un país que ellos nunca han visitado y en el cual no tienen ninguna conexión", explicó.
De acuerdo a lo expresado por la señora Kennedy, encontró una gran receptividad de parte de las autoridades dominicanas, las cuales se mostraron interesadas en enfrentar el problema. No obstante, su presencia en el país desató una andanada de críticas de parte de los denominados “nacionalistas” y otros sectores conservadores quienes denunciaron su presencia en como una injerencia en los asuntos nacionales.
Esos son los mismos grupos retardatarios que intentaron, sin éxito, introducir en la Constitución que actualmente se está revisando, una propuesta para impedir que se inscribiera en las escuelas a los hijos de los nacionales haitianos que viven en el país de manera “ilegal”; así como la reducción de la nacionalidad al “jus sanguinis”.
La visita de Terry Kennedy al país nos honra al igual que el galardón recibido por Sonia Pierre, el cual creo tantas ronchas en algunos sectores. Afortunadamente las posiciones racistas y xenofóbicas no encontrarán espacio, pues a la situación por la que atraviesan en el país miles haitianos y sus descendientes, hay que buscarle una solución basada en criterios de justicia, respeto a la dignidad humana y solidaridad, como ocurre hoy en todas las sociedades civilizadas. Un trato similar demandemos los dominicanos para todos nuestros nacionales que se encuentran en una situación parecida en tierra extranjeras.