"Señor José Antonio Aybar
Presidente de la
Asociación de
Cronistas de Arte
Su Despacho
Distinguido
Señor:
Hago provecho de
la presente para saludarlo y desearle los mayores éxitos en la responsabilidad
que como presidente de Acroarte le corresponde cumplir.
Con la misma
cortesía y en ocasión de celebrarse en el venidero mes de marzo la próxima
versión de los premios soberanos, por intermedio suyo deseo solicitar a la
Asociación que usted preside se incluya entre los premiados, como homenaje
póstumo, al desaparecido acordeonista Domingo García Henríquez –Tatico-, de
cuyas condiciones artísticas y sus aportes a nuestra música típica abundan los
testimonios. En libros sobre la historia del merengue típico, en escritos de
diversos géneros tanto en la prensa escrita como en las redes sociales e
incluso en un documental titulado Tatico Siempreque mereció el premio Casandra como
mejor especial de televisión en el 2006.
Hijo de la
principal dinastía de acordeonistas de la costa arriba, hijo del legendario
músico y compositor campesino Juan Henríquez –Bolo-, Tatico nació en Mata
Bonita, Nagua, en el nordeste del país, en julio de 1943, aprendió desde niño
el arte de tocar el acordeón. Después de morir Trujillo y cuando el merengue
necesitaba renovarse, mientras el merengue de orquesta encontró manos e
inteligencias laboriosas que empezaron a actualizarlo, el merengue típico
seguía estancado y amenazaba con quedarse rezagado. Entonces surgió
Tatico y se puso a la cabeza de la generación de músicos que recogió el
merengue típico del lugar donde languidecía, lo hizo evolucionar y ponerse al
día con los nuevos tiempos.
Tatico evolucionó
y renovó el merengue típico, le imprimió la fuerza, la vitalidad y el dinamismo
que demandaba una sociedad que iba cambiando y empezó a sonar el merengue
típico que el nuevo público deseaba. Así se consagró Tatico desde entonces y
aunque perdió la vida trágicamente en pleno auge de su carrera, dejó una
herencia musical imposible de valorar en toda su dimensión y hasta hoy ha sido
el acordeonista que con su estilo se constituyó en principal escuela y en el
artista típico más aplaudido e imitado. Con la particularidad de que la legión
de amigos y seguidores que lo asumió como su ídolo, nunca lo ha bajado del
pedestal en que lo colocó, aunque hacen ya treinta y ocho años de su muerte.
Como esposa
legítima que fui de Tatico y habiéndome tocado la honra de convivir con él
desde nuestro matrimonio el 4 de marzo de 1972, hasta pasar por el doloroso
momento de recibir su cadáver el 23 de mayo de 1976, pido que usted y la
Acroarte tomen en consideración la petición que le dirijo, que cuenta con el
respaldo entusiasta de numerosas personalidades y una amplísima legión de
seguidores de nuestra música típica.
Sin otro
particular por ahora y en espera de su respuesta, queda de usted muy
atentamente
Elba Chaljub
Mejía,
Las Gordas,
Nagua,"
Nota: Yo me cuento entre los que apoyan esta propuesta (I:C:M:)
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